A TI QUE ME ENSEÑASTE A CAMINAR

A TI QUE ME ENSEÑASTE A CAMINAR

De tu mano dí mis primeros pasos
Me enseñaste a nadar
Y con tu experiencia aprendí a volar.

También aprendí que el Tiempo sirve para dejar huellas
Y la razón para recogerlas
Pues no todo es error en lo vivido.

Descubrí que la vejez es un paso más al infinito
Y que en ella alguna vez sentiremos el abrazo de la soledad
Pero lo importante no es tenerla sino asimilarla como algo natural.

Sentí que la muerte solo es un viaje
Y en el compartiremos con otras almas
Porque en su fin siempre habrá una nueva vida

En tus arrugas leí cada uno de tus años
Y en sus escondidos versos amé tu historia
Porque en tu libro estaban escritos mis sueños.

Te viví como ídolo
Crecí reflejando día con día tu imagen
Y de tu mano conocí mis raíces.

Fuí testigo de tu trabajo
Fuí receptor de tu Amor
Y fuí quien dió la ultima lágrima por ti.

Gracias por tu existencia
Pues sin ti...No sería.
Sin tí...No sentiría.

Padre, donde quiera que estés
Todavía te siento a mi lado
Descansa en paz. Un beso.